una montaña rusa

Diecisiete días van, el diagnóstico es "Disnea" pero yo sé lo que es (siempre sé lo que es).
Decidí de una buena vez comenzar de cero, sin pensar en las circunstancias. Es mi último acto impulsivo esperando reparar el daño que me provoqué desde hace unos años atrás.
La opresión aparece desde que me levanto hasta que me acuesto pero no me asusta, ya nada lo hace.Puedo sentir como me esta asfixiando y me relajo dando una aspiración mas intensa. Advertida estoy de que los ataques de pánico pueden volver a aparecer y últimamente estan apareciendo en situaciones que me incomodan y no me dejan no ser yo: "hola, me voy". Admito que me complace que no haya opción, que no pueda elegir tener que atraevsar una situación incómoda, que de media vuelta y me vaya.
Me frustra que sea otro año el que tengo que esperar;no me gusta esperar. Estaba muy entusiasmada con este nuevo ciclo de mi vida pero ya me acostumbré a mi rueda de la fortuna, a la forma en que mi destino se burla de mi y yo me burlo de el.